¡Pintar con burbujas!

 

Burbugrafía 

¿Qué es la burbugrafía? Es una técnica plástica muy creativa que trata, simplemente, de pintar mediante burbujas de jabón. Además del aspecto creativo de su uso, tiene otros objetivos. Entre ellos el aprendizaje de los colores primarios y secundarios y, muy importante, el trabajo de ejercicios orofaciales que ayudan a los peques a tener un correcto desarrollo del lenguaje.  Os explicamos cómo organizar una sesión de burbugrafía con los peques.

¿Qué se necesita para realizar el experimento?

• Papel blanco. El tamaño dependerá si la actividad será individual o común (tipo mural).
• Recipientes de plástico
• Agua
• Jabón
• Paleta de madera para mezclar (sirve también una cuchara o tenedor)
• Témpera de colores. También podemos utilizar otro tipo de colorantes (acuarelas, tinte del papel pinocho, colorantes naturales, etc…)
• Botellas de plástico grandes cortadas por la mitad (solo usaremos la parte superior) Por tema de higiene, daremos una a cada peque.

Como trabajar con esta técnica plástica

Para realizar esta actividad necesitaremos mezclar el agua con el jabón, hasta que haga una buena espuma y, a continuación, le añadiremos la témpera o el tipo de colorante que hayamos elegido. Hemos de tener en cuenta que necesitaremos tantos recipientes con agua jabonosa como colores queramos obtener. Podéis experimentar mezclando diferentes colorantes y obteniendo nuevos colores. También podéis experimentar con la intensidad de color. A más colorante pongáis más intenso será el color de las burbujas. Dejaremos un solo recipiente con agua limpia y sin jabón.

Una vez tengamos todos los recipientes con el agua jabonosa y coloreada listos, daremos a cada peque su para hacer burbujas de jabón. Les pediremos que la mojen en los recipientes de manera que la boca quede arriba sin mojar, ya que será por ahí por donde los peques soplarán para obtener las burbujas. Cada vez que cambien de color, deberán ir a enjuagarla al recipiente con agua limpia, introduciendo solo la base por donde cortamos la botella.

El siguiente paso es el más divertido ya que es el momento en el que los peques eligen los colores y tras mojar la base cortada en el recipiente con agua jabonosa, soplan por la boquilla obteniendo muchas burbujas que vuelan ante ellos. Esto lo harán sobre el papel y podrán observar como las burbujas van haciendo bonitas combinaciones cromáticas conforme caen en el papel y estallan, pintando todo a su alrededor. Las «obras de arte» obtenidas son de lo más variado, pero todas muy bonitas y llenas de color.